sábado, 19 de julio de 2008

Por fin me decidi...




Y si... tengo que reconocerlo... las benditas cuestiones cotidianas me ganaron por un tiempo... los que me conocen, saben que somos una familia numerosa... y debo reconocer que demanda tiempo. Por eso estuve alejada del blog estos meses, porque mi familia y mi casa demandaron atencion full time... y obviamente, se lo dedique, como corresponde. Luego de comienzo de clases, que en un principio, vino acompañado de un nuevo habitante en casa, Nicolas el hijo menor de Danny vino a vivir tambien con nosotros, asi que empezamos con la reestructuracion de nuestro depto... lo que implico un mes de arreglos, polvillo, pintura u muebles fuera de lugar...Situacion estresante si las hay.


A eso le sumo tambien la llegada de una cachorrita hace algo menos de un mes, atendiendo a los pedidos de mi hija... es decir, a Sasha, nuestra boxer, le trajimos una compañera de juego y siesta, Darshana.


De manera que creo que recien ahora nos estamos recuperando de tal movimiento de muebles y nervios, pero con el corazon contento porque ahora cada uno tiene un espacio, aunque sea pequeño en nuestra casa, asi como en nuestro corazon. Por eso, mi ausencia. Y por mi amigo y hermano Jose, el regreso. Costo pero lo conseguimos... asi que ahora, a retomar de a poco esta hermosa costumbre de contar algo de lo que me interesa, me moviliza el alma y me hace ver un poco mas alla de las tareas de la casa... Espero que el reencuentro sea placentero!!!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Siempre un reencuentro es placentero,porque es un volver a encontrar,cosa que a veces en la vida nos cuesta tanto,pero siempre estamos a tiempo.
El Sensei.